Urticaria qué tan grave es?

La Urticaria 

Es una enfermedad crónica que no tiene causa como identificarse, pero requiere de tratamiento. No compromete la vida, pero se vuelve incómoda para quienes la padecen por el aparecimiento espontáneo de ronchas rojizas, evanescentes y a menudo pruriginosas que aparecen en la superficie de la piel. 

Estas manchas varían de tamaño y forma: pueden ser largas o redondas, evidenciarse o desaparecerse en intervalos de tiempo irregulares. También es posible que aflore la angioedema, es decir, la hinchazón de labios, cara, ojos, refieren los médicos especializados en alergia, asma e inmunología.

Esta enfermedad puede ocurrir como consecuencia de una reacción alérgica causada por una gran variedad de sustancias (alimentos, picaduras de insectos, medicamentos...) y la reacción ocurre en el lapso de una hora después del contacto, lo cual dura, por lo general, hasta seis semanas, en unos casos, y otros más tiempo.   

Existe dos clases de esta patología

Los especialistas hablan que existen dos tipos de urticaria: la espontánea aguda, que dura menos de seis semanas y que es la más común. Es "la que casi hemos tenido en algún momento de la vida por reacción de alimentos, medicinas, frío, estrés...".   

Existe la crónica espontánea o idiopática, en el cual el 95% de los casos no se sabe cuál es la causa, pero es prolongada (más de seis semanas) y, en el peor de los casos, se da con angioedema, es decir hinchazón de ojos, labios, cara y más.

Tratamiento

Médico especialistas en alergia, recomiendan siempre acudir al profesional para obtener un diagnostico adecuado y la terapia correcta.

La terapéutica de la urticaria consiste en mitigar los síntomas. Se receta antihistamínicos, pero hay que tener en cuenta que estos solo funcionan si se usan de una forma adecuada, explican los expertos.

Sin exámenes especiales

El diagnóstico es clínico. Quienes presentan los síntomas acuden a consulta y el médico reconoce el problema observando la piel, por la presencia de ronchas que sobresalen sobre una piel sana.

Se hacen exámenes de sangre o de la piel para confirmar la existencia de una reacción alérgica. 

La urticaria debe ser diagnosticada por un profesional para que no se la confunda con un problema de piel y se de paso a la auto-medicación con cremas que en nada colaborarán.

Las ronchas que produce esta entidad generan mucha comezón que incluso interrumpe el sueño de las personas, pero cuando desaparecen no dejan huellas en la piel.